En la provincia de Guantánamo, existen zonas muy secas y erosionadas por la acción del
clima y del hombre. Sin embargo, allí existen ejemplos de cómo
transformar terrenos degradados en tierras productivas a partir del
reordenamiento en el uso del suelo y de buenas prácticas agrícolas.
Todo ello es parte de una estrategia contra la desertificación y la
sequía.