La alegría de ser cubano

(Tomado de Somos Jóvenes)

Fotos: Kaloian



No sé a usted, pero a mí me gusta lo cubano. Cuando alguien pronuncia Cuba, a mí se me eriza el alma, se me emociona el cuerpo y me brilla la mirada. Cuba me enciende. Cuba me motiva. Cuba me alegra.No sé a usted, pero a mí ser cubano me da un alegrón tremendo. Ser cubano es una fiesta, poco importa si “la cosa está buena o mala”. Mi alegría de ser cubano no cree en rachas ni en malos tiempos.

Ser cubano es alegría, es jolgorio. Vaya, que ser cubano es un vacilón.No sé a usted, pero a mí esta Isla me encanta. Me fascina esa simetría en la cual no importa hacia dónde andes (este-oeste-norte-sur) siempre llegas al mar. Y a mí me fascina el mar, sentarme a escuchar las olas, a mirar las olas, a disfrutar de las olas.

Me encanta esta Isla porque, no importa hacia dónde andes (este-oeste-norte-sur), siempre te encuentras un cubano. Y a mÍ me fascina lo cubano, sentarme a escuchar a los cubanos, a mirar a los cubanos, a disfrutar de lo cubano. Porque lo cubano es único. Es como una tempestad calmada, una felicidad de carnaval a toda hora. ¡Ay, mi amigo! Estoy seguro de que a usted también le encantan las fiestas. Y eso es Cuba. Ser cubano es una fiesta.



No sé a usted, pero a mí me ha ocurrido que he llegado, sin previo aviso, a casa de un pariente y enseguida se ha corrido la voz y, como por arte de magia, en un santiamén “¡por que esto hay que celebrarlo, cará…!” se ha abierto un hueco en la tierra, se atizan unos carbones, se arma una púa y a cocinar dándole vueltas lentamente y entre tragos de ron no tan lentos, un puerco entero. Nadie puede prever de dónde salió la gente, el puerco o el ron.

Nadie lo sabe a ciencia cierta porque esta Isla es mágica. Aquí todo puede ocurrirte. ¡Todo eso sin ni siquiera desempacar las maletas o sacar los regalitos que mandó tu familia de allá a la gente de acá! Así somos los cubanos, siempre acordándonos de los que no vemos y a veces ni llamamos, pero todos sabemos presentes, unidos por ese lazo aun más fuerte de haber nacido en esta tierra, el de la familia cubana.Dígame si eso no se disfruta.

Todos reunidos cantando “bolerones para cortarse las venas”, hablando, riéndonos de las mismas historias (porque aquí las historias pueden contarse mil veces y siempre parecen nuevas), “pescando masitas” de los sitios mejor cocinados, disfrutando el olor de la grasa que se escurre y se evapora entre las brazas. No hay quien mantenga la línea con tanta hospitalidad.



¡Triglicéridos! ¡Colesterol! ¡¿Qué es eso?! Olvídate de tanta locura y goza que por ahí viene su yuquita con mojo, los plátanos chatinos y el arroz congrí que no puede faltar. Toma tu buen pedazo de puerco. ¡Y no te midas! Sírvete más. Y no me carezcas. Y “!DALE QUE TODAVÍA TE CABE UN POQUITO MÁS!”.

Porque así somos los cubanos. Tan hospitalarios que podemos hacer que la dicha se te desborde por los oídos, la boca, los ojos.Dígame si usted no disfrutas eso. Dígame que no desea de esa “hospitalidad a bocajarro” aunque uno esté cansado, o haya pasado las de Caín en un viaje, o venga desde el fin del mundo. Se agradecen tantas atenciones, tanto cariño “a lo cubano”.

Porque no sé si usted lo ha notado, pero los cubanos nos saltamos bien rápido del protocolo. Tenemos esa facilidad de hacerte sentir en familia sin demasiado preámbulo. Muchas personas se dan la mano. Aquí “venga un abrazo”, “dame unos besos, mi niño” (aunque uno pase de los 30 seguirá siendo un “niño”); porque así somos nosotros: niños grandes. Felices, buena gente, sanos para el cariño, campechanos de pura cepa.No sé usted, pero yo disfruto de esa maestría para “romper el hielo”". De ese respeto tan pegado y tan dicharachero y tan bromista porque “si uno no se divierte, de qué sirve la vida entonces”.

Filosofía tan cubana que es capaz de tirar a “choteo” hasta las experiencias más terribles. Uno se pone de ejemplo y allá van las historias tremebundas y a reírnos de lo lindo.


Porque el cubano exagera “de lo lindo”, porque no tenemos límites, no creemos en imposibles.Y nada tiene que ver tanto calor humano con el clima y sí con la pasión que nos une. Con el tipo de gente que somos porque “el cubano es el más hospitalario del mundo”. Aunque el título nos lo endilguemos nosotros mismos (como tantas otras cosas).

Pero al cubano hay que permitirle todo esto, pues si hubiese un instrumento que midiese esta temperatura, le aseguro, mi hermano, que nosotros romperíamos el termómetro.Y no piense nadie que no nos tomamos las cosas en serio. Podemos ser alegres, festivos, jaraneros, pero somos justos.

Los cubanos podemos andar con una sonrisa “de oreja a oreja” y realizar hazañas que muy pocos pueden siquiera concebir. Ejemplos, mi hermano, hay de sobra: Cuito Cuanavale, Indonesia con sus terremotos, médicos en las montañas, maestras en la selva amazónica… Los cubanos no tenemos límites.

Por muy difícil que sean las condiciones allá vamos con nuestra “cubana” a prodigar la solidaridad, a aportar nuestra semillita para hacer del mundo un sitio mejor y más justo para todos. Porque los cubanos no creemos en fatalismos. Creemos en el hombre, en lo mejor de la humanidad y, “”para que no haya inventos”, lo demostramos con nuestro ejemplo.

No sé usted, pero yo disfruto ser cubano. A mí me gusta todo lo cubano. Me encanta el olor de esta isla que se te impregna y que nunca puedes olvidar, es algo que llevas contigo a donde quiera que vayas. Somos parte de esta Isla como ella es parte de nosotros.

Me embarga el perfume que desprende esta tierra después de un buen aguacero, el aroma de las frutas maduras por doquier, el cielo límpido y azul de las mañanas de verano (que son casi todas las del año), el sonido de los ríos que corren por las montañas, las estrellas que desde la noche nos miran.



No sé para usted, pero para mí ser cubano es una fascinación. Disfruto desde lo más profundo de mí el que no creamos en diferencias raciales. Da igual ser blanco, amarillo, negro o verde porque aquí “el que no tiene de congo, tiene de karabalí”. Somos un pueblo mestizo, criollo rellollo, que (¡y que alguien diga lo contrario!) ha aportado al mundo uno de los mejores y más sabrosos inventos de todos los tiempos: ¡la mulata cubana!

Me regocija ser cubano, haber nacido en este sitio donde se ha cocinado lo indio, lo chino, lo español y lo africano para hacer un ajiaco tremendo y alejarnos definitivamente de todo falso puritanismo, de todo ideal de superioridad para considerar a los hombres, a todos los hombres, como iguales.

Gozo de esta riquísima caldosa de “Kike y Marina”, la saboreo y me enorgullezco porque entre sus condimentos tenemos la sabiduría de Martí, la valentía de Maceo, la visión de Céspedes, el coraje de Camilo, la fuerza de Mella, el ahínco de Guiteras, la moral de Echeverría, las enseñanzas de Varela, los pantalones de Frank, la fuerza de Celia, el corazón de Mariana, la estirpe del Moncada.

Porque de esa olla han emergido miles de héroes (tierra fecunda esta), emergen aún y continuará haciéndolo porque condimentos, que somos los cubanos, hay de sobra.No sé que opinará usted, pero a mí la música cubana me encanta. Puedo escuchar canciones en cualquier idioma, de cualquier nacionalidad o ritmo, pero nada me enciende más el alma que un buen son o un suave bolero; nada me “desorbita” más que una movida rueda de casino al paso de los Van Van o Bamboleo, o una conga santiaguera con su trompeta china anunciando que ya rompió la fiesta.

Puedo escuchar a Led Zeppelín y valorarlo, pero prefiero una guitarra y unas cuantas canciones de Silvio en el malecón a cualquier concierto.

Puedo deleitarme con Pavarotti, pero si me ponen al Benny, ahí sí que me pongo morado con Moré. Si suena un rumba o un cajón, a pesar de que pueda ser algo patón, allá se me activa la sangre y no me puedo contener en la silla, porque aquí no importa cómo se baile, sino bailar. A los cubanos, nuestra música nos conmueve y alegra. A nosotros, “que nos quiten lo baila´o”.

No sé usted, pero yo disfruto las ocurrencias de la gente de esta tierra. Ese “¡qué volá, asere!” me resulta inconfundible para localizar un cubano debajo de cualquier fachada. ¡Y qué decir de los dicharachos! Los cubanos somos “el pueblo elegido”, aunque nos hayamos elegido nosotros mismos. Y no hay “quien nos pase gato por liebre” o “nos coja de bobos”. Ni tenemos miedo, pues el que lo tenga “que se compre un perro”, o que “no se preocupe, que del suelo no pasa”, o “a mí, plan”, y “a mí si que me roncan los…” Porque así somos en está nación.

Los cubanos somos “candela”, los que inventamos el “manteca´o”, el “café con leche” y “descubrimos el agua tibia”. Los que no vivimos en una Isla, sino en “la Perla de las Antillas”, y no nos dan las noticias pues “eso lo sabíamos hace un siglo”; ni cerramos las puertas, pues las “trancamos”; ni nos morimos, sino que “estiramos la pata” o “cantamos el manisero”; y sabemos “la hora en que mataron a Lola”, y dormimos “como un lirón”, y comemos “como un animal”, y si una mujer tiene tremendo cuerpo es “un monstruo”; y, si no, “está de madre”, porque para nosotros cuando algo está bueno es “bárbaro” o “está salvaje” o “está escapa´o”.

Nosotros somos así. Nunca provocamos un enredo, sino “tremendo arroz con mango”.No sé a usted, pero a mi me encanta la naturaleza. Puedo admirar un baobab o una secuoya americana, pero si algo me conmueve es estar bajo la sombra de una ceiba o admirar una palma real.

No hay nada más dulce que colarme en un cañaveral y pelar ahí mismo esa “caña cubana” y endulzarme con su mela´o.Puedo ver un tucán o un canario, pero si me dan a escoger entre aves coloridas me quedo con el tocororo, y si de trinos se trata déjenme con un tomeguín del pinar o con el coraje del pitirre.

Si de montañas se trata, prefiero la Sierra, Topes de Collantes, los mogotes de Viñales. ¡Y qué decir de las playas! Denme un Varadero, una Bibijagua, una Guardalavaca. No sé usted, pero yo puedo ver cualquier película y valorarla y emocionarme con su estética, sus logros, sus actuaciones, su trama. Puedo disfrutar la cinematografía planetaria pero no cambiaría por nada mis “Memorias del subdesarrollo”, o “La muerte de un burócrata”, o “Fresa y Chocolate”; vaya, que para mí Titón tendría más de diez Oscars (si esta fuese la medida del éxito cinematográfico).

No sé a usted, pero a mí no hay nada que me emocione más, y debo decirlo con franqueza, que casi me “saque las lágrimas”, que ver a mi bandera ondear en lo alto de un podio olímpico. Ver los 110 metros con vallas, el lanzamiento de la jabalina, el martillo, el judo, la lucha, el béisbol (¡la pelota!), el voleibol, cualquier deporte donde estemos los cubanos, me hace borrar toda lógica y dejar que la pasión se me desborde.

Me gusta que Cuba gane. Aunque sea “a las escupidas” no puedo evitar inmiscuirme, seguirlo, gritar: ” ¡Cará… ganamos!” y gozar junto con todos aquellos cubanos que, igual que yo, se emocionan “de lo lindo” porque esta islita de 10 millones tiene “para dar y para llevar”.No sé usted, pero yo me siento orgulloso de que en esta nación uno no tenga que ser “creyente” para saberse protegido por San Lázaro, la Caridad del Cobre o Santa Bárbara. De escuchar un “bembé” en una esquina, un cajón en la siguiente y música sacra al doblar.

Mi Cubita es así.Nosotros los cubanos sentimos que Dios nos regaló el Paraíso terrenal. Ya lo dijo Cristóbal Colón cuando nos “descubría” y exclamaba: ” ¡Esta es la tierra más hermosa que ojos humanos hayan visto”! No se equivocaba el genovés.

Cuba es bella. Cuba es linda. Cuba es la tierra más hermosa, al menos para nosotros.No sé para usted, pero para mí es un gozo disfrutar de un buen tabaco cubano, “¡el mejor tabaco del mundo!”, con una tacita de café de esas “que levantan un muerto”. O irme a una fiesta y darme un traguito de ron cubano o tomarme un helado Coppelia o una malta “hecha en Cuba”.

Porque los cubanos somos así y nos gusta lo nuestro, extrañamos lo nuestro, disfrutamos de la dulzura de esta tierra y de lo que nace de ella. Es tan así que un amigo, refiriéndose al helado tropical (¿lo recuerdas?), exclamó que en Cuba era “el único sitio donde el frío tiene sabor”.Los cubanos no creemos en adversidades.

Tiempos difíciles hemos tenido de sobra pero, no sé qué pensará usted, ninguno ha conseguido doblegar la alegría de los cubanos. Nos hemos visto “con el agua al cuello”, pero nunca hemos dejado de reírnos o de tender la mano a quien más lo necesita. Así somos, no podemos evitarlo. Un poquito por aquí, otro por allá, y así seguimos “luchando”, saliendo adelante a pesar de que nadie lo espere. Y a mí eso me hace feliz, pues no hay nada que valore más que la capacidad del hombre para crecerse, de levantarse si tropieza.

Y de eso, los cubanos tenemos de sobra.Yo no sé para usted, pero para mí ser cubano es mucho más que una nacionalidad, un deber o una obligación, un derecho por haber nacido aquí. Para mí ser cubano es llevar en la sangre la pasión que nos une a esta tierra, a todos los hombres que han vivido y muerto por ella. Llevar con nosotros un Grito de Yara, la Protesta de Baraguá, Girón, el Escambray, la Sierra.

Cargar con nuestra Isla en peso (como decía Virgilio) y llevarla en nuestro corazón a cuanto rincón nos marchemos. Desperdigar lo que aquí tenemos, la amistad, la solidaridad, el amor hacia los hombres.

Ser cubano es un orgullo. Uno es cubano por siempre. Se es cubano se viva donde se viva. Es una hermandad que va más allá de cualquier frontera geográfica, es nuestra identidad, nuestra razón y nuestra pasión. No sé para usted, pero para mí es así. Yo me siento orgulloso de ser “cubano ciento por ciento”.

En este 2012, amigos... amor, salud y felicidad en un mundo de Paz


Amigos míos:

Como pasa tiempo de rápido, ya estamos cerca del último día del año 2011. Comenzamos en unas horas el 2012, un año más de vida, un gran regalo. Un año nuevo es un momento para desear a nuestros amigos, familiares y compañeros de trabajo, un momento de paz, felicidad y prosperidad..

Este año que comienza será una oportunidad para convertir la vida, el hogar, el trabajo, la relación de pareja…en algo diferente, es también un momento para reflexionar sobre las experiencias pasadas, situaciones presentes y sobre todo, en el porvenir.

Si miramos hacia atrás, nos percataríamos que de alguna manera nuestras vidas no han cambiado. Sin embargo, con seguridad ya todos han preparado sus propósitos para el nuevo año. Unos se prometen perder algunas libras, o aseguran que van a organizarse mejor y otros, como algunas de mis amigos, pretenden encontrar su media naranja en este 2012.

Quién ese primer día del año, no diría…: “En mi hogar, seré un hombre o una mujer diferente, un mejor padre o madre, le daré más alegría a mi vida y le daré además, las gracias por existir… O diría: “Seré diferente en mi trabajo, le daré otro estilo a mi vida, otra forma de ser, le daré otro color a las cosas que me rodean. Nada, amigos, que cada año nos trazamos metas diferentes en todos los ámbitos de la vida.

No importa cuál sea su propósito, amigos míos, los más importante es que vivamos en armonía y unidos por el bien de todos. Ahora que comienza el 2012, es el momento para desear lo mejor en la vida a todos mis amigos y familiares. También para agradecer a quienes nos han ayudado en el camino de la vida, a quienes nos han querido, nos han comprendido… A todos, les deseo un año de mucho amor, salud y felicidad en un mundo de Paz.

Las Mujeres guantanameras: Decisivos aporte para el cumplimiento de café

El indultado del Presidente


Tomado del Blog de Yohandry

Como andaba algo ebrio, su voz resonaba lo suficientemente alta mientras conversaba con los amigos, a la vez que compraba viandas en un mercado de La Habana, para enterar a todos de que él era uno de los indultados por el Presidente.

Él andaba en el ajetreo de las compras, en un agromercado de la capital, y entre cebollas y yucas me le acerqué, pero no quiso dar su nombre. “Deje eso, no me busque problemas, compadre”. Sin embargo, también en voz demasiado elevada, me contestó: “Publique ahí que yo doy gracias a Raúl, a Dios y al Papa por poder pasar este fin de año con mis hijos, mi madre y mi familia, que es lo más grande que uno tiene”.

Le pregunté sobre sus deseos para el año venidero, y permaneció unos segundos con el mazo de cebolla suspendido en el aire y los ojos, enrojecidos, detenidos en quién sabe qué punto del porvenir o del pasado. Luego, puso su manaza sobre mi hombro, y con la solemnidad de quien hace un juramento, respondió con cuatro palabras, esta vez pronunciadas casi en susurro: “Ser un buen hombre”.

Yohandry Fontana
La Habana

Nota:

En la Gaceta Oficial de la República de Cuba, el Decreto del Consejo de Estado con todos los nombres de los liberados.

Nota Oficial ( + Video)


El Consejo de Estado de la República de Cuba, en cumplimiento de la política establecida y ante las numerosas solicitudes de familiares y diversas instituciones religiosas, en un gesto humanitario y soberano, acordó indultar a más de dos mil novecientos sancionados, en atención a las características de los hechos cometidos, la buena conducta mantenida en prisión, la edad y las enfermedades que padecen, así como el tiempo extinguido de sus condenas.

Entre los que serán puestos en libertad destacan personas con más de 60 años de edad, enfermos, mujeres y también jóvenes sin antecedentes penales previos, que obtuvieron un oficio y elevaron su nivel cultural y posibilidades de reinserción social.

No se incluyen en este beneficio, salvo contadas excepciones, sancionados por delitos de Espionaje, Terrorismo, Asesinato, Homicidio, Tráfico de Drogas, Pederastia con Violencia, Robo con Fuerza en vivienda habitada, Violación y Corrupción de Menores. No obstante, serán puestos en libertad algunos condenados por delitos contra la Seguridad del Estado. Todos han cumplido una parte importante de la pena en prisión y mostrado un buen comportamiento.

Este acto se hará efectivo en los próximos días.

En VIdeo: Informa Raúl Castro que Cuba indultará a más de 2 900 sancionados

Todos los que dirigimos debemos asumir una conducta firme ante la indisciplina y el descontrol en los cobros y pagos


Discurso del General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, en el VIII Periodo Ordinario de Sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, el 23 de diciembre del 2011, "Año 53 de la Revolución".

El octavo periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional que hoy concluye ha aprobado el plan de la economía y la Ley del Presupuesto para el año 2012. Igualmente, los diputados recibieron abundante información sobre la marcha del proceso de implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución, acordados por el VI Congreso. También rindieron cuentas ante el Parlamento el Presidente del Tribunal Supremo Popular y el Fiscal General de la República.

Esta sesión ha sido precedida por la reunión ampliada del Consejo de Ministros el pasado 16 de diciembre y la celebración el miércoles 21 del Tercer Pleno del Comité Central del Partido, así como el trabajo de las 12 comisiones permanentes del Parlamento desde el pasado martes. Por todo ello, no abundaré sobre los temas analizados y me referiré solo a algunas cuestiones fundamentales.

En medio de los vaivenes de la crisis financiera global, la economía cubana ha mostrado un desempeño aceptable y sostenido, el Producto Interno Bruto creció un 2,7 por ciento, inferior al 3,0 por ciento planificado, debido, básicamente, a la inejecución de inversiones y al incumplimiento de algunas producciones agropecuarias y de las industrias alimentaria y de materiales de la construcción.

Al propio tiempo, en el 2011 se inició la paulatina recuperación de la producción azucarera, se sobrepasó la cifra récord de visitantes extranjeros, se ha logrado preservar el equilibrio monetario interno y la dinámica favorable en la relación productividad-salario medio. Estructuralmente mejora la economía a partir de proporciones más adecuadas en las inversiones, priorizándose las de carácter productivo e infraestructural.

Continuamos avanzando en el restablecimiento de la credibilidad internacional de nuestra economía, mediante el estricto cumplimiento de las obligaciones financieras que resultan de la renegociación de deudas con los principales acreedores, política que proseguiremos reforzando en lo adelante.

El 18 de diciembre del pasado año al intervenir en este Parlamento, expresé que antes de concluir el 2011 suprimiríamos totalmente las limitaciones de transferencias desde bancos cubanos al exterior a favor de suministradores extranjeros.

Hoy estamos en condiciones de afirmar que hemos cumplido ese compromiso y, además, que se han puesto en vigor procedimientos para evitar nuevas retenciones en el futuro, salvo circunstancias excepcionales.

El plan de la economía del próximo año fue confeccionado en correspondencia con los Lineamientos aprobados por el VI Congreso del Partido y posee un nivel cualitativamente superior en cuanto a la conciliación de las demandas entre productores y clientes. No obstante, se mantendrán las tensiones financieras, lo que nos obliga a continuar reduciendo gastos de todo tipo, que son todavía una de las primeras fuentes de ingresos a nuestra disposición. El Producto Interno Bruto deberá crecer un 3,4 por ciento.

A pesar de que se planifica el aumento de las producciones nacionales de alimentos, entre ellas arroz y granos y en consecuencia, disminuirán las cantidades a importar, estas a resultas de la elevación de los precios, o sea, las importaciones de alimentos, ascenderán a algo más de 1 700 millones de dólares. Tal realidad nos indica con elocuencia la necesidad de avanzar con solidez en el propósito de poner en producción todas las tierras todavía ociosas o deficientemente explotadas.

El déficit del presupuesto del Estado se mantendrá al mismo nivel que en el 2011, o sea, el 3,8 por ciento del Producto Interno Bruto, asegurándose con racionalidad los servicios gratuitos a la población en materia de salud, educación, cultura y deportes, así como la seguridad social, los subsidios a la canasta familiar normada y a personas naturales con insuficiente solvencia para la adquisición de materiales de la construcción, entre otros.

Estoy convencido de que la corrupción es hoy uno de los principales enemigos de la Revolución

Pasando a otro asunto, muy estrechamente ligado al funcionamiento económico de la nación y del cual, a pesar de que se ha hablado en varias ocasiones, incluyendo el Informe Central al VI Congreso, los propios Lineamientos —concretamente el No. 10—, intervenciones ante el Parlamento y en múltiples reuniones del Consejo de Ministros; no se aprecia el avance requerido, es el papel primordial del contrato en las interrelaciones de las empresas, unidades presupuestadas y las formas no estatales de gestión, lo que se refleja en la deficiente situación de los cobros y pagos, con el consiguiente trastorno a las finanzas internas y el favorecimiento de hechos delictivos y la corrupción.

Lo anterior se puso de manifiesto, por solo citar un ejemplo, en los suministros fraudulentos de productos agropecuarios a los mercados de la capital, que no existieron, ni se cultivaron, generando un desfalco de más de 12 millones de pesos a causa del actuar delictivo de directivos, funcionarios y otros trabajadores de las empresas estatales comercializadoras, así como de agricultores pequeños que se prestaron como testaferros, a todos los cuales se les exigirán responsabilidades administrativas y penales, en correspondencia con la gravedad de los hechos.

Traigo el tema a colación para ilustrar la necesidad imperiosa de que todos los que dirigimos en los diferentes niveles, desde la base hasta los máximos cargos del país, asumamos una conducta firme ante la indisciplina y el descontrol en los cobros y pagos, que constituyen una de las causas y condiciones principales para el delito. Estoy convencido de que la corrupción es hoy uno de los principales enemigos de la Revolución, mucho más dañino que la actividad subversiva e injerencista del gobierno de Estados Unidos y sus aliados dentro y fuera del país.

La Contraloría General de la República, la Fiscalía y los órganos especializados del Ministerio del Interior, tienen instrucciones de combatir este flagelo, con toda la severidad que permiten nuestras leyes, como en su momento se enfrentó exitosamente el incipiente tráfico de drogas a partir de enero del 2003.

En esta batalla estratégica se ha elevado la coordinación, cohesión y exigencia en el enfrentamiento al delito y comienzan a verse algunos resultados, tanto en los hechos llamados de "cuello blanco", cometidos por directivos y funcionarios nacionales y extranjeros vinculados con el comercio exterior y la inversión extranjera, como en las fechorías llevadas a cabo por delincuentes comunes en contubernio con dirigentes administrativos y empleados de dependencias estatales, en los procesos productivos, la transportación y distribución en entidades de la industria alimentaria, el comercio, la gastronomía, el sistema de la vivienda y los ministerios de la Industria Básica y la Agricultura.

Precisamente, en el sector agropecuario, desde el primero de agosto del presente año se fortaleció, de manera sensible el combate contra el hurto y sacrificio de ganado mayor y la consiguiente comercialización de su carne en el mercado negro, un fenómeno que a lo largo de los años floreció con determinada impunidad, provocando graves afectaciones a productores estatales y privados, no solo desde el punto de vista económico, sino también moral y social.

La Policía Nacional Revolucionaria, junto a otras fuerzas del Ministerio del Interior, en estrecha cooperación con las organizaciones políticas y de masas, ha asumido con profesionalidad y sistematicidad la tarea de erradicar definitivamente el cuatrerismo de los campos cubanos, delito en cuya ejecución participan en complicidad con los matarifes, jefes y especialistas de empresas estatales, unidades básicas de producción cooperativa, agricultores pequeños, veterinarios y directores municipales y otros funcionarios de la institución que se supone debe velar por el crecimiento de la masa ganadera en el país, me refiero al Centro de Control Pecuario, conocido por sus siglas como CENCOP.

Creo oportuno aclarar que no se trata de una campaña más, como ciertamente ha sucedido en el pasado, cuando las acciones para restablecer el orden, al decursar del tiempo, se han descontinuado y sobrevino la rutina y la superficialidad, dándole la razón a aquellos que esperaban que todo volvería a ser igual y que "las aguas cogerían su nivel" para seguir medrando a costa del patrimonio de nuestro pueblo.

Puedo asegurarles que esta vez sí se acabarán los cuatreros en el país, como se acabaron los traficantes de droga, y no resurgirán, porque estamos decididos a hacer cumplir las instrucciones impartidas por el Gobierno y los acuerdos del Congreso del Partido. Lo mismo les digo respecto a aquellos burócratas corrompidos, con cargos obtenidos a golpe de simulación y oportunismo que utilizan las posiciones que todavía ocupan para acumular fortunas, apostando a una eventual derrota de la Revolución.

Este miércoles, en el Pleno del Comité Central, analizamos con profundidad estos factores y mostramos una serie de documentales e interrogatorios a delincuentes de cuello blanco. En su momento, en las respectivas provincias, les serán mostrados a todos ustedes, compañeros diputados, y también a otros dirigentes.

Tenemos muy presente la alerta de Fidel el 17 de noviembre del 2005 en el Aula Magna de la Universidad de La Habana, hace algo más de seis años, al referirse a que este país puede autodestruirse por sí mismo, que hoy el enemigo no puede hacerlo, nosotros sí, y sería culpa nuestra —concluía el Jefe de la Revolución en aquella ocasión. Por eso acordamos hace dos días, en el III Pleno del Comité Central que les acabo de mencionar, que acabaremos con esa plaga parasitaria.

En nombre del pueblo y de la Revolución advertimos, que dentro del marco de la Ley, seremos implacables.

Sobre la política migratoria: reafirmo la invariable voluntad de introducir paulatinamente los cambios requeridos en esta compleja temática

Muy vinculado con esa firme determinación de recuperar la disciplina social en nuestra Patria, se encuentra el proceso de implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social del Partido y la Revolución que fue debatido en la actual sesión de la Asamblea Nacional, pues a nadie le cabe dudas de que con este panorama que les estoy narrando sería muy difícil actualizar nuestro socialismo.

La Comisión Permanente para la Implementación y Desarrollo ha brindado una amplia información sobre la marcha de su trabajo y la adopción de un conjunto de decisiones en cumplimiento de los acuerdos del Congreso del Partido. No me detendré en hacer un inventario de ellas, son solo los primeros pasos. Las cuestiones fundamentales están pendientes, lo que no significa que no se avance al ritmo previsto.

Continuaremos haciendo realidad todo lo acordado, sin prisa, pero sin pausa, con la integralidad y gradualidad requeridas, sin apresuramientos ni improvisaciones, contribuyendo a la superación de la vieja mentalidad dogmática y corrigiendo oportunamente los errores que podamos cometer. No descuidaremos, ni un instante, la unidad de la mayoría de los cubanos en torno al Partido y la Revolución, esa unidad que nos ha servido para llegar hasta aquí y seguir adelante en la construcción de nuestro Socialismo.

Como era de esperar, no han faltado las exhortaciones, bien y mal intencionadas, para que apresuremos el paso y se nos pretende imponer la secuencia y alcance de las medidas a adoptar como si se tratara de algo insignificante y no del destino de la Revolución y de la Patria.

Tras la autorización de la compra venta de autos particulares y viviendas, no pocos consideran urgente la aplicación de una nueva política migratoria, olvidándose de las circunstancias excepcionales en que vive Cuba bajo el cerco que entraña la política injerencista y subversiva del gobierno de los Estados Unidos, siempre a la caza de cualquier oportunidad para conseguir sus conocidos propósitos.

El 1ro. de agosto pasado en este Parlamento abordé públicamente el tema y expuse que nos encontrábamos trabajando para instrumentar la actualización de la política migratoria vigente y que se avanzaba en la reformulación y elaboración de normativas reguladoras, en correspondencia con las condiciones del presente y el futuro previsible. Hoy ratifico todos y cada uno de los planteamientos realizados en aquella oportunidad, al tiempo que reafirmo la invariable voluntad de introducir paulatinamente los cambios requeridos en esta compleja temática, sin dejar de valorar en toda su integralidad los efectos favorables y desfavorables de cada paso que demos.

Ahora dedicaré algunos minutos a la política exterior.

El 2011 ha sido un año convulso para el mundo, hoy se manifiestan tendencias cada vez más peligrosas y reaccionarias, a la par que se incrementan las expresiones de resistencia y protesta popular contra el capitalismo neoliberal.

Los mecanismos de Naciones Unidas, creados para preservar la paz y la seguridad, han sido manipulados para imponer al planeta la tiranía de Estados Unidos y la OTAN, que asumen como modelo el "cambio de régimen", la violación de los principios del Derecho Internacional y el empleo de los emporios financiero-mediáticos para atizar el odio y la violencia.

Mientras, en decenas de ciudades norteamericanas y europeas, aumenta el apoyo al mensaje de los "indignados", dirigido a poner fin a la creciente desigualdad en los países desarrollados.

Instamos a esos gobiernos, que tanto pregonan sobre democracia, derechos humanos, libertad de prensa, etc., etc., a escuchar sus legítimas demandas, a consultar a sus pueblos las políticas económicas, las medidas de ajuste y a tomar en cuenta a la opinión pública, sin la brutal represión a que con frecuencia someten a las manifestaciones estudiantiles, profesionales, obreras, de inmigrantes y otras minorías.

Al propio tiempo, Nuestra América avanza hacia la integración y la soberanía regional, muestra de ello fue la constitución en Caracas, el pasado 2 de diciembre, de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), lo que representa el hecho institucional de mayor trascendencia en el hemisferio durante los dos últimos siglos desde la Independencia.

Cuba recibió el honor de haber sido elegida unánimemente para presidir la CELAC en el 2013 y acoger su tercera Cumbre al terminar ese año. Con ello, se reivindica a toda la América Latina y el Caribe, cuyos pueblos invariablemente alentaron la heroica lucha de los cubanos.

Pocos días después, en Trinidad y Tobago, nuestro país agradeció la solidaridad de los hermanos caribeños en la Cumbre CARICOM-Cuba.

El Consejo de Estado, en un gesto humanitario y soberano, acordó indultar a más de 2 900 sancionados

Antes de Semana Santa recibiremos la visita apostólica de Su Santidad, el Papa Benedicto XVI, Jefe del Estado de la Ciudad del Vaticano y Sumo Pontífice de la Iglesia Católica.

Nuestro pueblo y gobierno tendremos el honor de acoger a Su Santidad con afecto y respeto.

Los cubanos no olvidamos los sentimientos de amistad y respeto que dejó en 1998 la presencia en nuestra tierra del Papa Juan Pablo II.

Asimismo, en la medida que crece la ejecutoria internacional y el reconocimiento mayoritario a la Revolución Cubana, nunca fue mayor el descrédito de la política de los Estados Unidos hacia nuestra región y la condena en el mundo, en la propia sociedad norteamericana y en la emigración cubana, al genocida bloqueo económico, político y mediático contra Cuba.

Al mismo tiempo que actualizamos nuestro socialismo, cambiando todo lo que debe ser cambiado, el gobierno de los Estados Unidos sigue anclado al pasado.

Barack Obama, el onceno Presidente estadounidense desde 1959, parece no comprender que Cuba hizo enormes y prolongados sacrificios para conquistar su independencia en el siglo XIX y defender su libertad en Playa Girón, en 1961, en la Crisis coheteril de Octubre de 1962, en el comienzo del Periodo Especial en la última década del siglo XX y en todos estos años del actual siglo XXI. A veces, da la impresión de no estar siquiera informado de que, ante esta realidad, su gobierno ha tenido que renunciar a los pretextos más repetidos para justificar el bloqueo e inventar otros cada vez más insostenibles.

Con ecuanimidad y paciencia, nos dedicaremos a cumplir los acuerdos del Congreso mientras transcurren las elecciones estadounidenses. Sabemos que el bloqueo continuará y que se incrementará el financiamiento y los intentos de convertir a un puñado de mercenarios en una oposición desestabilizadora, pero eso no le quita el sueño a un pueblo revolucionario como el nuestro, instruido, armado y libre, que no renunciará nunca a defenderse (Aplausos).

Aunque el inmovilismo del gobierno norteamericano y su ausencia de voluntad política para mejorar las relaciones alientan a los sectores más reaccionarios a impulsar nuevas provocaciones y acciones de agresión, Cuba mantiene la propuesta de avanzar hacia la normalización de sus vínculos con Estados Unidos y desarrollar la cooperación en todas las esferas que puedan beneficiar a ambos pueblos.

Los lazos familiares y el limitado intercambio que existen entre los dos países demuestran hoy cuán positiva sería su expansión para el bien de todos, sin las trabas y condicionamientos impuestos por el gobierno de Estados Unidos, que subordina cualquier progreso a su política de hostilidad e injerencia, encaminada a restablecer el dominio sobre Cuba.

Antes de concluir, debo informar a esta Asamblea que el Consejo de Estado, en un gesto humanitario y soberano, acordó indultar a más de 2 900 sancionados.

Entre estos se encuentran mujeres, enfermos, personas con más de 60 años de edad y también jóvenes que han elevado su nivel cultural y las posibilidades de reinserción social.

No se incluyen en este beneficio, salvo contadas excepciones, los sancionados por delitos de Espionaje, Terrorismo, Asesinato, Homicidio, Tráfico de Drogas, Pederastia con Violencia, Violación y Corrupción de Menores y Robo con Fuerza en vivienda habitada. No obstante, serán puestos en libertad algunos condenados por delitos contra la Seguridad del Estado, que han extinguido en prisión una parte importante de la pena, con buena conducta.

De manera sistemática y en cifras anuales superiores a las comprendidas en este indulto, el Tribunal Supremo Popular, la Fiscalía General de la República y los órganos especializados del Ministerio del Interior, según las regulaciones legales vigentes, evalúan y disponen la excarcelación anticipada de sancionados, atendiendo a su comportamiento, las características de los hechos cometidos y las condiciones familiares y de salud, a lo que se unieron, esta vez, múltiples solicitudes de familiares y de diversas instituciones religiosas, entre ellas el Consejo de Iglesias de Cuba y la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, por intermedio de su Presidente.

Se ha tenido en cuenta, además, la anunciada visita a Cuba del Papa Benedicto XVI y la celebración del 400 aniversario del hallazgo de la imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre.

El indulto se hará efectivo en los próximos días, como una muestra más de la generosidad y fortaleza de la Revolución.

Al propio tiempo, manifestamos la disposición de conceder la excarcelación anticipada a 86 ciudadanos extranjeros, de 25 países, incluidas 13 mujeres, condenados por los tribunales por delitos cometidos en Cuba, bajo la condición previa de que los gobiernos de sus naciones de origen acepten su repatriación.

Por los canales diplomáticos se hará llegar próximamente la información requerida a dichos gobiernos a través de las autoridades correspondientes.

Por último, a pocos días de finalizar este año de intenso trabajo, llegue a todo nuestro pueblo, en primer lugar a nuestros valerosos Cinco Héroes y sus valientes familiares, una calurosa felicitación por el año nuevo y un aniversario más del triunfo de la Revolución.

Ya en enero nos espera la celebración de la Primera Conferencia Nacional del Partido, así que no habrá mucho tiempo para descansar.

Eso es todo.

Muchas gracias.

(Ovación.)

Preside Raúl Castro última reunión de 2011 del Parlamento cubano


Presidida por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, la Asamblea Nacional del Poder Popular inició en la mañana de este viernes su 8vo Período Ordinario de Sesiones de la VII Legislatura en el Palacio de Convenciones de La Habana.

Para esta reunión, la última del año 2011, se prevé que los parlamentarios cubanos conozcan y aprueben el Plan de la Economía y la Ley del Presupuesto del Estado para el próximo 2012; también recibirán una información actualizada sobre la marcha del proceso de implementación de los acuerdo del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC).

La agenda de los diputados y diputadas de la Isla incluye además las rendiciones de cuenta del Tribunal Supremo Popular y la Fiscalía General de la República, máximos órganos judiciales del país.

Los más de 600 parlamentarios celebran este viernes su 8vo Período Ordinario de Sesiones luego de trabajar dos días en comisiones, jornadas que sirvieron para el análisis exhaustivo de su labor como fiscalizadores del desempeño de los sectores, actividades y organismos, bajo su jurisdicción.

Previo a este encuentro, los diputados también fueron informados sobre la gestión del Instituto Nacional de Deporte, Educación Física y Recreación Física (INDER)