Es una ciudad linda que aún tiene la dicha de poseer en las casas más antiguas, horcones de madera rolliza, techos de zinc o tejas de barro y amplios portales, detalles que recuerdan la época en que por ordenanza de la corona española se propagaban los negocios y con ello, el progreso de la Villa de Santa Catalina de Guantánamo, que el próximo 1ro de diciembre llega a su aniversario 145.
Satisface atravesar el simbólico parque José Martí y allí, encontrar a mis coterráneos reunidos platicando de sus intereses, todos con la extraordinaria felicidad que los identifica. Este es mi Guantánamo, el de la gente que nace abrazando la bandera tricolor y que vive amando Cuba, la tierra más hermosa que ojos humanos han visto. Un Guantánamo que hoy a través de imágenes, regalo a mis lectores.