Ha pasado
varios días y aun la II
Cumbre de la
Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
(CELAC), recientemente celebrada en La Habana, Cuba todavía
es noticia. El hecho de que la mayor de las
Antillas fuera sede de este encuentro, donde 29 de los 33
mandatarios invitados se hayan comprometido hacia el logro de la paz y el
respeto entre nuestras naciones de la región y donde se firmara unánimemente la Declaración de La Habana, es un claro
ejemplo para el mundo.
Si
reflexionamos en la corta vida de este joven proyecto integracionista,
admira que en tan poco tiempo, la
CELAC fuera protagonista del rescate de los sueños primitivos
de sus fundadores en torno a la búsqueda de una solución pacífica de polémicas
y desterrar para siempre el uso de la fuerza en busca de la necesidad del logro
de la unión entre los países que la integran.
La Proclama de América Latina y el Caribe como
Zona de Paz, firmada por los miembros de CELAC en Cuba, ratifica el saldo
de sólo la paz puede alcanzarse a través del diálogo, la armonía y el pleno
respeto al derecho internacional y a los derechos humanos ratificado por una
cultura de paz.
La cita de la Celac señaló el camino en la construcción de la integración latinoamericana y caribeña. Además, dejó de ser un sueño por los fundadores para hacerse realidad y marcar una ruptura con un pasado de desunión que nos revela el surgimiento de una nueva época de unidad y cooperación entre los pueblos de nuestra América.
La cita de la Celac señaló el camino en la construcción de la integración latinoamericana y caribeña. Además, dejó de ser un sueño por los fundadores para hacerse realidad y marcar una ruptura con un pasado de desunión que nos revela el surgimiento de una nueva época de unidad y cooperación entre los pueblos de nuestra América.
Sin dudas,
vivimos un cambio de época. Vivimos un cambio donde América
Latina y el Caribe están en condiciones de dejar de ser, definitivamente, como
decía nuestro José Martí, ¨aquellas repúblicas dolorosas de América,
levantadas entre las masas mudas de indios, al ruido de pelea del libro con el
cirial¨, para convertirse en la avanzada de la paz y la solidaridad en
todo el continente Americano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario