Hace más de una semana culminó en la provincia de Guantánamo, el
séptimo encuentro de la Guerrilla de Blogueros, sin embargo, sobre el encuentro de una cuarentena de quienes laboramos en las redes sociales día a día, siguen los comentarios en las redes sociales de internet.
Salir de internet era la meta. Verse cara a cara era lo ideal para unir a personas de
pensamientos diferentes, pero que eran en suma, grandes
amigos. Por ello, hace casi tres años, decidieron hacer
físicos los lazos y unirse para recorrer toda Cuba, subir lomas, vivir en campaña y en condiciones adversas.
Todo comenzó aquel el 14 de julio de
2012, cuando subieron al pico Turquino, luego vino al Nicho, en Cienfuegos, yconocer el proyecto Korimakao de la
Ciénaga de Zapata. Posteriormente el centro Martin Luther King, de La Habana, le abrió sus puertas, fueron además a Tope de Collantes en Sancti Spiritus, al pinareño valle de
Viñales, a Camagüey y en esta última edición, vinieron a la provincia más oriental de Cuba: Guantánamo.
Comenzaron a llegar a esta calurosa ciudad un día antes, por tanto, los primeros, tuvieron más tiempo de conocer la ciudad. Luego, al incorporarse los restantes, comenzó el programa con una visita a la Plaza de la Revolución Mariana Grajales Coello, la
única que lleva nombre de mujer en Cuba. Esa tarde, desafiando la lluvia, viajamos a Caimanera.
Recorrimos 23 kilómetros para llegar
hasta este municipio guantanamero, el más más cercano a los 117 kilómetros cuadrados ocupados
por la ilegal Base Naval estadounidense, ocupada desde 1903, en contra de la voluntad del pueblo cubano. El sitio causó asombro en los visitantes debido a las instalaciones militares vistas desde el
horizonte, postas a uno y al otro lado de un lado, y la bahía, esa bahía de Guantánamo, totalmente en calma, cual la vida de los caimanerenses. Caimanera era para muchos, un sueño ahora hecho realidad.
Otros sitios recorrieron los blogueros durante su visita a la ciudad del Guaso. No faltó el Museo Provincial que entre otras piezas museables, atesora los objetos del vuelo conjunto Cuba-URSS, entre ellos el módulo de descenso. Visitaron también el Zoológico de Piedras, único de su tipo en el mundo y allí entre las lomas, compartieron el espacio físico con unas 500 figuras en piedra moldeadas por el artista Ángel Iñigo.
Camino a Baracoa y por carretera, pasamos por los municipìos San Antonio del Sur e
Imías, sitio dotado por una narturaleza singular y portador de la franja costera sur
conocida para todos, como semidesierto cubano. Siempre La Farola sorprende. Imponente se exhibe esta obra de la Revolución poseedora de vistas imaginables, montañas, bellos helechos arborescentes y una densa vegetación que propician al viajero un ambiente refrescante.
Atrevesamos La Farola y nos recibió Baracoa, antigua, pequeña, acogedora. Para muchos vista por vez primera, para otros, repite su belleza inigualable. Ibamos camino al campismo El Yunque, lugar que el Almirante Cristóbal Colón describiera en su Diario de Navegación: "... y de la
parte del Sudeste un cabo en el cual hay una montaña alta y cuadrada que
parecía isla".
El Yunque está ubicado al lado de las aguas tranquilas del río Duaba, es un sitio precioso. No subí hasta la elevación, pero quienes pudieron, entre ellos mi hijo, cuentan cómo les impresionó la ciudad desde lo alto, la vegetación frondosa entre cocoteros, plantaciones de
cacao, plátanos, guayabas... Y en lo más alto de este sitio fascinante, el busto de Antonio Maceo para recibir a todos los que suben hasta su cima.
Paso del Toa, en el Consejo Popular de Cayo Güin, fue la sorpresa para la Guerrilla de blogueros que no pensaban disfrutar Festival de
Juegos Tradicionales de la Montaña. Fue realmente sorprendente. Halar
el tronco, pelar el coco con la coa en punta, agarrar y
ensartar cangrejos, competencia de balseros, competencia de
habilidades en encontrar el tesoro escondido en lo bajo del río....
Y allí, justo entre juegos tradicionales, el Estanquillo Patria, inicitiva de llevar hasta las serranías cubanas libros, revistas, periódicos de todas las provincias y que cada bloguero carga junto a sus pertenencias para que forme parte de la biblioteca de
la comunidad que tiene la dicha de disfrutar del río Toa, el más caudaloso de Cuba. No faltó el recuerdo y homanaje al más universal de los cubanos nuestro José Martí, por eso, regreso a Guantánamo, llegamos hasta el monumento en Playita de Cajobabo, para dejar patentado el amor a la Patria.
Muchas sorpresas tuvieron los blogueros durante estos días por Guantánamo, la ciudad de las tres C, como le suelo decir. Pero lo más sorprendente fue el cariño conque recibimos a nuestros colegas tanto en la ciudad como en los sitios donde hicimos estancia. Amor, solidaridad y entrega, eso fue este encuentro de Guerrilla que dentro de seis meses volverá a la semilla cuando nuevamente los blogueros asciendan el pico Turquino por Granma. Ahí nos veremos.