No aparecieron de improviso. Nadie las imaginó como son. Las caracteriza la dulzura, la ternura, la bondad, el amor sin límites ni fronteras... Son mujeres cubanas que escriben hermosas páginas de historias, unas a la luz, otras secretas u ocultas en espacios menos inimaginables, pero construyen y luchan.
La fuerza y grandeza guardadas en su pecho rebelde, las define. Ellas forman parte de los éxitos y conquistas sociales nuestra Revolución y pertenecen a la Federación de Mujeres Cubanas, organización que este 23 de agosto cumple 52 años.
! Cuánta fuerza y valor en tu figura! Constructoras, educadoras, médicas, ingenieras, periodistas, soldados de la Brigada de la Frontera, combatientes, federadas todas y artesanas de la Revolución, aman, luchan y llevan por dentro la energía que las sostiene, impulsa y ensancha el corazón de todo ser humano.
Sin tu presencia, la obra infinita de la Revolución no habría sido posible. No hay logro científico, cultural y deportivo, aporte a la defensa de la Patria donde no conste la figura apasionada de la mujer cubana. Y esto sucede por que están en todas partes: en el aire, en el humo, en el canto, en el amor…
Con tu presencia, haces de la vida cotidiana una constante Revolución. Solo vale un gesto o una sonrisa tuya para que aparezcan con las manos extendidas, la palabra precisa y el consuelo vital que renueva. Eres, federada cubana, ejemplo de Mariana, Haydée, Melba, Celia, Vilma Espín y has dejado, una huella indestructible para inundar todos los espacios y transformarte en ama de casa, madre, esposa, trabajadora y amiga.
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