Hoy 12 de septiembre, René, Ramón, Antonio, Gerardo y Fernando, cumplen trece años de injusto encierro en cárceles norteamericanas. ¿La razón? Impedir con sus misiones la realización de actos criminales contra Cuba, orquestadas por grupos terroristas del estado norteamericano de La Florida.
Trece años de injusto encierro en los Estados Unidos y separado de sus familiares, sufren los Cinco. Y este hecho, deviene una indudable vergüenza para la justicia del gobierno de los Estados Unidos, país que pretende dar lecciones al mundo en materia de defensa de los derechos humanos. Sin embargo, la verdad y la razón se imponen, la solidaridad internacional crece cada día más a favor de los hermanos cubanos.
Los Cinco se encuentran prisioneros en cárceles norteamericanas, sufriendo la lejanía de sus seres queridos y de su patria natal, víctimas del odio, la mentira y el rencor. Una vez más se manifiestan la arbitrariedad de un sistema corrupto e hipócrita y su cruel ensañamiento estos valerosos hombres.
¿Por qué los Cinco permanecen apresados en cárceles de los Estados Unidos hace trece años?, ¿Hasta cuándo la espera? Estas son unas de las interrogantes que nos hacemos cuando hablemos de Antonio, Fernando, Gerardo, Ramón y Fernando González - hombres que han devenido verdaderos ejemplos de combatientes antiterroristas.
¿Cómo tamaña infamia en los Estados Unidos de América, país que se dice luchar contra el terrorismo, sin embargo, acoge en su territorio a connotados criminales como Luis Posada Carriles y Orlando Bosch? Esto no es más que una muestra de la doble moral del Imperio.
Estamos emplazados a romper el muro del silencio. Los Cinco no son espías, ni con sus acciones pusieron en riesgo la seguridad nacional de los EEUU, ni la vida de sus ciudadanos. Levantemos nuestras voces hacia el mundo. Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, son hombres sinónimos de sacrificio y auténtico estoicismo en medio de este absurdo proceso manipulado.
La lucha no debe cesar. Somos amantes de la verdad, la justicia y la Paz. Estamos completamente seguros de que el triunfo definitivo residirá en seguir sumando personas y grupos de solidaridad con la causa. Todo lo que se haga por los Cinco jamás es suficiente para lograr se haga justicia y los valerosos cubanos regresen a su Patria con sus familiares.
La historia de Gerardo, René, Antonio, Fernando y Ramón, es sinónimo de sacrificio y auténtico estoicismo en medio de este absurdo proceso manipulado. Unámonos cada vez más en la lucha internacional por la liberación de estos cubanos dignos. No podemos cansarnos. A trece años de injusto encierro, la verdad debe de salir adelante. Cuba los contempla orgullosa.
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